sábado, octubre 21, 2006

Cachonda e irrevente, la ceremonia mexicana de MTV Latino

Venegas y Knoxville de Jackass. Foto AP. Clic para agrandar.

Independientemente de la irreverencia y libertad que tuvieron los artistas participantes en la ceremonia de entrega de los premios MTV Latinoamérica, celebrada el jueves pasado en el Palacio de los Deportes del Distrito Federal, el encuentro fue un reconocimiento a los músicos del país y a la importancia que tiene México en la industria musical del continente. Además, el acto, que por primera vez se realizó fuera de territorio estadunidense, integra/coloca a nuestro país en el mapa del espectáculo internacional. Lo que no es poca cosa.

La velada, sin duda se la llevó el británico Robbie Williams, con su excelente actuación en los dos temas que interpretó: Rudebox y Rock dj. Williams recorrió todo el escenario, bailó, gesticuló, se metió la mano en sus genitales y propinó un enorme beso a una afortunada de la primera fila, a quien, caballerosamente el cantante aprobó diciendo: "muy bien". Coronó su actuación al mostrar sus nalgas, lo que puso loquito al personal femenino y, estamos seguros, a uno que otro machín.

Fue una ceremonia muy mexicana, no sólo porque los máximos ganadores resultaron Panda, la banda de Monterrey, y los tapatíos de Maná, sino por las acertadas intervenciones de los artistas y músicos nacionales. A las 21 horas, después de una desorganización capaz de desquiciar al más prudente, comenzó la velada. En el escenario apareció la cantante colombiana Shakira; el júbilo de los espectadores de inmediato se hizo presente en el inmueble, que no estuvo a toda su capacidad. Shakira recicló uno de los números de su reciente gira, donde con un espectacular vestido rojo, largo, bailó deconstruyendo el proscenio cantando su éxito No, preludio de una excelente velada.

Palomazo tras palomazo

Después, en el otro extremo del escenario, armada con su acordeón, apareció Julieta Venegas con su éxito Me voy; a media rola el grupo Kinky irrumpió con su nuevo sencillo, A dónde van los muertos, acompañados por Julieta en la voz, un palomazo muy acertado. Pero la sorpresa siguió cuando apareció el reggaetonero Daddy Yankee, complementando la primera trinidad musical ecléctica de la noche.

Ya con la temperatura adecuada, la voz del doctor Alfonso Morales, figura emblemática de la lucha libre en México, presentó a los conductores de la ceremonia: Ana de la Reguera y el grupo Molotov. Se otorgó la primera Lengua de la noche a Panda, por mejor grupo a dúo; La Molocha, con su humor cábula, presentó a Roberto Pettinato, quien dio las gracias por "aplaudirme tanto cuando no saben quién carajo soy".

Luego, Ana de la Reguera paseó con una correa a tres chicas vestidas de colegialas, como las actrices de la telenovela Rebelde. Soltó: "Les gustan mis perritas. Son muy obedientes". Ordenó: "A ver, la patita", una le tendió la mano. A la segunda la hizo "mover la colita" y a la tercera brillar los senos; socarronamente, Ana dijo: "Yo pensé que eran unas rebeldes".

Luego salió el actor Diego Luna, quien dijo: "Bienvenidos al caos de la ciudad de México, la ciudad más chingona del mundo. Qué bueno que los de MTV se dieron cuenta de que Miami no es Latinoamérica y se vinieron a dar un baño de pueblo; pero sus visas vencen mañana y les espera un vuelo charter brincamuros para que planeen la próxima entrega; todavía nos faltan muchas ciudades: Caracas, Venezuela, Buenos Aires y Bogotá".

Ya se habían entregado las Lenguas en las categorías de mejor canción, que ganó Shakira con Hips don't lie; de video, que obtuvo Maná por Labios compartidos, además del galardón para mejor artista rock; mejor solista, para Julieta Venegas; artista pop, Kudai, y alternativo, Panda, entre otros.

Después, el grupo Calle 13, que recibió el premio a banda promesa, saltó al escenario con cuatro bailarinas con máscaras de Blue Demon puestas. La banda hizo mover al público con su hip hop golpeante; después, apareció la reina de la noche, Nelly Furtado, para cantar con ellos No hay igual, logrando uno de los puntos culminantes de la celebración. También actuó Belanova y Evanescence, las cuales fueron recibidas como bandas grandes; todos se pararon para caderear cómodamente.

Ruda combinación

Más adelante, la estrella del programa Jackass, Johnny Knoxville, acompañado por Blue Demon Junior, salió a presentar al ganador de la siguiente categoría, pero el sobre con el nombre estaba escondido en la piñata humana Chris Pontius. Knoxville le proporcionó un palo a Demon y le recomendó "pegarle fuerte"; la piñata humana sólo aguantó dos embestidas.
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Acción con la que Robie Williams coronó su actuación, el pasado Jueves Foto Reuters

Ana de la Reguera de "teibolera" antes de cantar "Vente en mi boca". Foto AP. Clic para agrandar.

Aún faltaba una de las mayores sorpresa de la noche: Ana de la Reguera salió acompañada por su hermana Ali, del grupo femenino de Las Ultrasónicas, y dijo: "Llevo el rock en la sangre; les presento a mi hermana. Les vamos a demostrar que las mujeres somos más cabronas para decir las cosas", y a dúo soltaron algunas coplas de Vente en mi boca. Molotov les respondió con otras estrofas que, por la deficiencia del sonido, resultaron inaudibles. Las hermanas respondieron con Qué grosero y dejaron mudos a los integrantes del grupo. Ana y Ali recibieron una enorme ovación del público por el gesto punk contra el machismo.

Para ese momento ya se habían entregado los premios al artista nuevo central: Fonseca (Colombia), artista nuevo sur: Axel (Argentina) y artista pop internacional: Robbie Williams (Inglaterra), quien ironizó: "¿No se habrán equivocado y será el premio artista gay internacional?, estoy confundido". Otros de los galardones entregados fueron para artista de rock internacional, que se llevó My Chemical Romance (Estados Unidos), y para artista nuevo internacional, otorgado a James Blunt (Inglaterra).

Cuando todos imaginaban que ya nada podría sorprenderlos apareció Maná para cantar Labios compartidos, la gritería generalizada reveló que eran de los más esperados de la noche.

Los presentadores dieron la despedida al anunciar el palomazo entre la banda mexicana Allison y la cantante Belinda, quienes en medio de una lluvia de confeti y explosiones dieron el cerrojazo final. Atrás quedaron las palabras del actor Jack Black en la cinta La escuela de rocanrol: "Antes había una forma de enfrentar al Efectivo: el rocanrol, pero el Efectivo acabó con él inventando MTV".

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