Nota: Debido a problemas técnicos con el blog donde se publican las crónicas de los partidos, durante lo que resta del mes de junio se publicarán aquí.
No le hace ningún bien al futbol el temor de los árbitros a marcar justamente las faltas de las "grandes" potencias del este deporte. En el primer juego de la jornada, el árbitro español Luis Medina se derrumbó ante el peso de la casaca italiana al marcarles un penal a favor en la última jugada del encuentro. En una acción muy reñida, pero sin falta, Fabio Grosso simplemente se tiró al sentir el contacto con el defensa australiano cuando fue él quien lo arrolló.
Quizá Medina quiso compensar la justa expulsión de Marco Materazzi, quien soltó tremendo leñazo, cobrando una falta que no existió. De esta manera, el arbitraje en esta Copa sigue a la baja, y deberá obligar a la FIFA a tomar medidas para evitar que se sigan dando tan malos arbitrajes.
Este controvertido penal le di la victoria a los azzurri mediante el cobro de Francesco Totti, decretando la injusta eliminación de los aussies. El partido fue cerrado, más por la mezquindad de los ítalos que por las virtudes de los canguros amarillos. Italia quedó a deber mucho futbol, tal como lo ha venido haciendo a lo largo de este campeonato del mundo. Para ser honestos, no hizo los méritos como para llevarse el triunfo. Con la derrota de 1-0, los australianos regresan a casa y los azzurri enfrentarán a Ucrania, que ganó en su encuentro de hoy.
Por su parte, los helvéticos enfrentaron a Ucrania en un partido que osciló entre flojo y muy aburrido. Con sus limitaciones, los suizos salieron a dar la batalla lo mejor que pudieron, pero su vocación defensiva pesó más. Por su parte, los ucranianos insistieron todo lo que pudieron para tratar de hacer caer el gol del triunfo, pero éste se negó a llegar.
Con el marcador 0-0, se fueron a los tiempos extras, y ambos equipos dejaron claro de que ya no arriesgarían nada. Se sucedieron algunas acciones medianamente emocionantes, pero no hubo nada que pueda destacarse.
Así, se fueron a las tandas de penales. El estrella Schevchenko fue el primero en tirar, y falló el penal. Para sorpresa de todos, los suizos fallaron en todas sus oportunidades, mientras que los de Ucrania ya no lo hicieron, con lo que el marcador en serie de penales fue 3-0, eliminado a los nativos de la tierra del chocolate y el cu-cú, y enviando a los incrédulos representatnes de Ucrania a medirse con Italia en cuartos de final.
No cabe duda, las camisetas de los grandes siguen pesando demasiado sobre el ánimo y el criterio de los árbitros.
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